
Cómo elegir tu taza perfecta según tu tipo de desayuno
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Puede parecer una tontería, pero no lo es: no todas las tazas sirven para todos los desayunos. Hay quien toma un café solo de un trago, quien lo acompaña de leche y media tostada, y quien convierte el desayuno en un ritual de media hora con café con leche, zumo, fruta, pan… y paz.
Y sí, para cada una de esas personas hay una taza ideal. Aquí te damos pistas para encontrar la tuya (o para elegir el regalo perfecto si conoces a alguien muy de café).
1. Para los de café solo, sin azúcar y con prisa
Si eres de los que solo necesitan un café fuerte y corto para arrancar el día, tu taza no necesita ser enorme. Busca una más pequeña, que conserve bien el calor, con un diseño compacto que puedas agarrar con una sola mano mientras haces otras cosas.
Ideal: una taza tipo espresso o una mini taza de cerámica gruesa.
En Tazzeri tenemos modelos pensados justo para eso: pequeños, cómodos y con mucho carácter.
2. Para los de café con leche y tostada (el clásico de siempre)
Aquí necesitas una taza de tamaño medio, que aguante bien el calor y tenga un asa cómoda. Algo que puedas sostener mientras hojeas el móvil o lees una revista. No demasiado grande, pero lo bastante ancha como para sentir que el café “acompaña”.
Ideal: una taza de unos 300 ml, con forma redondeada y base estable.
Las formas suaves y los colores tranquilos ayudan a crear ese momento de calma que tanto se agradece al empezar el día.
3. Para los que desayunan como si fuera brunch
Café con leche, tostadas, fruta, yogur… Si tu desayuno es una experiencia completa, necesitas una taza grande. No solo para que no se te quede corta a mitad del desayuno, sino porque acompaña bien el gesto de tomarte tu tiempo.
Ideal: una taza amplia, con buena capacidad (más de 400 ml), estable y cómoda.
Aquí es donde las piezas de cerámica más grandes de Tazzeri brillan: pesan lo justo, son cálidas al tacto y tienen esa forma envolvente que invita a abrazarla con las dos manos.
4. Para los de infusiones o tés a media mañana
Aunque no sea estrictamente desayuno, hay quienes hacen su primera pausa del día con una infusión. Y aquí también importa la taza: debe ser alta y mantener el calor sin quemar.
Ideal: una taza más vertical, de borde fino, con asas amplias para no tocar el cuerpo caliente de la taza.
Algunos modelos de Tazzeri tienen esa forma estilizada perfecta para este tipo de ritual más ligero.
La taza ideal no se elige solo con los ojos
Elegir bien tu taza es como elegir bien tus zapatillas favoritas: debe gustarte, sí, pero sobre todo debe acompañarte bien en tu día a día. Lo importante no es que sea perfecta, sino que encaje contigo.
Por eso en Tazzeri no todas las piezas son iguales, ni buscan la simetría exacta. Cada una tiene su propia personalidad. Como tú, y como tus mañanas.